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Mes de la Memoria en Escobar
En Escobar estamos transcurriendo el Mes de la Memoria. Una decisión municipal de trascendencia marcando una línea en el pensamiento de lo público como un espacio común.
La Memoria es un territorio de disputas. Cada sujeto tiene memoria. Cada pueblo, busca darse una memoria.
Lo colectivo no es asimilable a lo individual, pero sí tienen tensiones que se entrelazan. La memoria es una forma de asomarse al pasado. En nuestro caso, al pasado reciente.
Es reciente no solo porque haya transcurrido hace relativamente poco tiempo. Sino porque las huellas de los traumas abiertos aún están ahí.
El Terrorismo de Estado fue la estrategia que llevaron adelante quienes comandaron la Dictadura Cívico – Militar. La desaparición de personas fue el instrumento que trágicamente los distinguió, sin dejar de lado la apropiación de bebés, niñas y niños, tanto como el asesinato y la tortura. Esto ocurrió.
Los crímenes de la Dictadura fueron considerados de lesa humanidad. Dejaron 30000 desaparecidos, alrededor de 500 bebés apropiados como “botín de guerra” y el inicio a punta de bayoneta del neoliberalismo más impiadoso que se pueda conocer.
Durante este período oscuro, hubo luces. La Resistencia a los genocidas la encabezaron mujeres. Mujeres que se agruparon en torno a la Plaza de Mayo, a su pirámide. Que circularon para evitar contravenciones con las que las amenazaban los vigilantes de turno. Para ser siempre más valientes y más inteligentes que nadie. De allí surgieron Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, ya en 1977 habían logrado agruparse y empezar a oponer vida a tanta muerte regada por estos siniestros personajes. “Viejas locas”, le dijeron, “son mujeres, ya se van a cansar”, sostuvieron en su miseria “algunos machirulos” de entonces.
Van 42 años desde ese 1977, no se cansaron. No solo no se cansaron, sino que demostraron que decían la Verdad, que no eran ningunas locas. Y enseñaron al mundo que el camino es la búsqueda de justicia, siempre justicia. Ahora, ¿qué camino llevaba a la Verdad y la Justicia? La memoria. Eligieron la Memoria. Siempre la memoria se emparenta con la vida.
Decíamos que la Memoria está en disputa, en el cruce de tensiones que nos condicionan como sociedad. La memoria es parte de la identidad, nos constituye. Y la generación de una memoria colectiva implica estos desafíos que son políticos, entendidos en términos de debate en la esfera de lo público y lo común.
A finales de la última Dictadura Cívico – Militar, el gobierno del último general, Reinaldo Bignone buscó darse una Autoamnistía. Y aparecieron las ideas de “guerra sucia”, “excesos”.
Una de las primeras medidas de Alfonsín, en el retorno a la democracia en diciembre de 1983, fue formar la CoNaDeP y se elaboró el informe conocido como Nunca Más. Su otra gran medida fue el juicio a las Juntas Militares, único país de América Latina que logró semejante proceso de justicia en tan poco tiempo. Luego de los alzamientos carapintadas, se sancionaron las leyes de Punto Final y Obediencia Debida. En estos tiempos se forjó la memoria que aún funciona en buena parte de la sociedad, la llamada “Teoría de los dos demonios”.
Con Menem, vinieron los “Indultos” y la política de una supuesta reconciliación nacional basada en el olvido, en el freno a las causas judiciales que se continuaban sustanciando en distintos juzgados. Lo único que mantuvo este proceso judicial funcionando fueron las apropiaciones de menores, que implicaron robar las identidades de esos bebés, niños.
Luego de la crisis del 2001, la Memoria surge fuerte. Contra el olvido, contra el silencio. A partir del 2003 y hasta el 2015, con el empuje de las políticas de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, se motorizan las causas judiciales, se anulan las leyes del “perdón” a los participantes del terrorismo de estado, se bajan los cuadros de genocidas que aún estaban dando vueltas, y el Estado asume una política de Memoria por la Verdad y la Justicia. Son 12 años en los que los Derechos Humanos son parte de las políticas del Estado. La búsqueda de Verdad y Justicia a partir de la Memoria se lanzan fuertemente a la construcción de un país más justo.
En eso seguimos, en eso estamos. Hacer Memoria para alcanzar la Verdad y la Justicia, para construir una Argentina cada vez más democrática, más justa.
La educación escobarense tiene memoria
Desde el año 2015, la Escuela de Educación Secundaria N° 6 de nuestro Distrito lleva el nombre de Martha Velazco, una querida médica de Escobar, secuestrada y desaparecida en su hogar, junto a su esposo Hugo Morini. Martha había sido funcionaria municipal en los años previos al golpe; militó en el peronismo y siempre estuvo al servicio del bienestar y la Justicia Social. Por iniciativa de la comunidad educativa, se logró nombrar a la escuela para que su recuerdo siga siempre vivo, junto a los más jóvenes. Los profesores Marcelo Álvarez y Luis Alberto “Beto” Messa trabajaron junto a sus alumn@s, la Directora y las familias para lograr que la memoria de Martha se mantenga en nuestro querido Escobar.
Txt: Ignacio D`Asero